domingo, 30 de diciembre de 2018

CREW Republic Rest In Peace, Barleywine "Made in Germany"


Hace un tiempo os presentábamos la cervecera craft alemana CREW Republic, de la mano de su American IPA In Your Face, que nos había encantado. Pues bien, en esta ocasión queremos cerrar el año cervecívoro con otra de las referencias de estos artesanos bávaros, una cerveza más maltosa y alcohólica, de las que hay que tener a mano cuando refresca. Así que coged la mantita y acurrucaos en el sofá, porque hoy hablamos de Rest In Peace, una Barleywine cuyo equilibrio se acerca al de las versiones norteamericanas de este estilo, pero que está elaborada con lúpulos británicos que le proporcionan sabrosos y delicados matices especiados. He aquí lo que sucede cuando se hace una aproximación craft a un estilo típicamente real ale.

Se trata de una cerveza bastante turbia, de color castaño claro con reflejos anaranjados, mientras que su fina corona de espuma es de color beige claro y se desvanece rápidamente. En nariz presenta un aroma relativamente intenso, dominado por notas de fruta madura, caramelo, tofe y un toque de madera y especias. En boca se muestra como una cerveza de cuerpo medio, con un sabor bastante intenso, aunque no demasiado para su estilo, con un marcado dulzor de entrada que da paso a un final seco y moderadamente amargo. En el paladar destaca la fruta madura, acompañada de madera, con toques de caramelo, bourbon, vainilla y sutiles matices especiados.

Resumiendo, una buena Barleywine, no dejéis de probarla si os gusta este estilo tanto como a nosotros. Para acompañarla, nada mejor que un queso fuerte, siendo particularmente apropiados los quesos azules, aunque los estofados o los postres a base de crema son otras opciones que también pueden funcionar bien con esta cerveza. Y dicho esto, ¡feliz y cervecívoro 2019 a tod@s! ¡Salud!

Estilo: English Barleywine
ABV: 10,1 %
Amargor: 65 IBU
Lúpulos: Herkules, East Kent Golding y Fuggles
Maltas: Pilsener y Crystal

domingo, 16 de diciembre de 2018

Dark Series: Imperial Stout, un buen petróleo de Bidassoa Basque Brewery


Hoy aterriza por primera vez en Cervecívoros Bidassoa Basque Brewery, una cervecera artesana con sede en Irun, donde fue fundada en 2014 fruto de la pasión cervecera de Carlos Arrecubieta, un científico que se sumergió en este mundo mientras trabajaba en New York. Carlos es el maestro cervecero de Bidassoa, y antes de dedicarse a la elaboración de cerveza obtuvo un doctorado y acumuló una amplia experiencia trabajando en el campo de la microbiología, con lo que está claro que este hombre sabe lo que se hace con las levaduras. Eso sí, hoy la historia no va tanto de levaduras como de maltas. Y es que de entre el amplio catálogo permanente de Bidassoa Basque Brewery, os proponemos probar una de sus cervezas más populares y mejor valoradas: Imperial Stout, perteneciente a la colección Dark Series. 

Como no podía ser de otra forma, esta cerveza presenta un color caoba intenso, prácticamente negro. Al servirla forma una buena cantidad de espuma cremosa y de color beige oscuro, aunque al cabo de un rato sólo queda una finísima capa. En nariz nos ofrece un agradable e intenso aroma maltoso, dominado por notas de chocolate y moca, con toques de tofe, caramelo y leche quemada. Al probarla envuelve la boca con su cuerpo denso, y descubrimos que su 10,2 % ABV está peligrosamente bien integrado. El principio del trago se caracteriza por un sabor dulce bien marcado pero no empalagoso, envuelto en notas de chocolate acompañadas de toques de caramelo y leche quemada. El final del trago, que resulta largo y algo seco, trae consigo un amargor bastante intenso, impregnado en notas de café y corteza de pan.

Da gusto encontrase cervezas como esta, una Imperial Stout intensa y compleja, como mandan los cánones, pero sin rizar el rizo con ingredientes o procesos especiales. No es que eso esté mal, nos encantan los experimentos, pero a veces apetece una cerveza que simplemente se ajusta a las características tradicionales del estilo y está verdaderamente buena. Como tal, esta referencia de Bidassoa será una buena elección como postre o digestivo, como compañera de sofá, o como acompañamiento para postres intensos, especialmente aquellos con una buena dosis de chocolate.

Estilo: Russian Imperial Stout
ABV: 10,2 %

jueves, 6 de diciembre de 2018

Trappistes Rochefort 10, la reina de la Abadía de Notre-Dame de Saint-Rémy


Regocijaos, amig@s cervecívor@s, pues hoy toca birrote de los buenos. Y es que la cerveza que vamos a tratar hoy es la referencia estrella de una de las que podríamos llamar las siete cerveceras Trapenses "originales", ahí es nada. La cervecera en cuestión es la Brasserie de Rochefort, que pertenece a la Abadía de Notre-Dame de Saint-Rémy, también conocida como Abadía de Rochefort, nombre de la localidad en la que se encuentra y que pertenece a la región belga de Valonia. La Abadía fue fundada en 1230, aunque no fue hasta 1595 cuando se empezó a elaborar cerveza en ella. Aunque las instalaciones de la cervecera se modernizaron en 1952 y la producción de cerveza es hoy en día la principal fuente de ingresos de la Abadía, los monjes han preferido mantener una producción limitada, la justa para cubrir sus necesidades. En cuanto a su repertorio, se reduce a tres cervezas oscuras, una Belgian Dubbel (Trappistes Rochefort 6) y dos Belgian Dark Strong Ales (Trappistes Rochefort 8 y 10). La que os traemos hoy es, como decíamos al principio, la joya de la corona, la Trappistes Rochefort 10, una cerveza fuerte y sabrosa para disfrutar con calma, poco a poco, entre otras cosas porque os va a dar mucha pena cuando se acabe.

Esta joya Trapense es de un intenso color castaño oscuro con reflejos cobrizos, casi transparente, sólo con una ligera turbidez. Su espuma, de color beige claro, es cremosa, abundante y persistente. En nariz golpea fuerte con un intenso y complejo aroma cargado de notas de especias, licor, caramelo y fruta madura, con toques de tofe, chocolate, madera y corteza de pan. Presenta un cuerpo entre medio y denso, con una intensa calidez alcohólica que no resulta para nada desagradable. Su sabor es fuerte, dominado por un dulzor licoroso y afrutado, matizado con un toque de amargor. En el paladar destacan la fruta madura, el anís, el caramelo y la miel, acompañados de un toque de chocolate.

En pocas palabras, un auténtico cervezón, intensa y compleja, una de esas maravillas que sólo pueden salir de una de las grandes abadías Trapenses originales. Su intensidad la convierte en una cerveza de trago corto, pero si os dejáis llevar no tardaréis mucho en terminarla porque, en cuanto el retrogusto comience a desvanecerse, sentiréis el irrefrenable deseo de tomar otro trago. Os recomendamos esforzaros en ser pacientes, primero porque tiene un 11,3 % ABV, y segundo porque vale la pena dejar que gane un poco de temperatura. Será un acompañamiento ideal para quesos fuertes y guisos de sabor intenso con carnes rojas. Sin embargo, es probable que la mejor compañía para esta cerveza sean una manta y una buena película o un libro en una tarde de invierno.

Estilo: Belgian Dark Strong Ale
ABV: 11,3 %
Amargor: 27 IBU
Cereales: Malta de cebada y cereales no malteados
Ingredientes adicionales: Azúcar